lunes, 29 de diciembre de 2014

Criaturas salvajes

Braulio Ortiz ha escrito para El Día de Córdoba un nuevo texto sobre Mente animal, y sólo puedo agradecerle con total sinceridad que haya leído el poemario con tanta atención y que lo haya tratado con tanto cuidado. Su generosidad es mayúscula. Y su facilidad para extraer de los poemas lo esencial fijándose en los rincones más reservados, hablando de la «intimidad áspera y dolorosa» del libro, me ha desarmado por completo. Reproduzco aquí su reseña con un inmenso ¡gracias!


En la obra de Pilar Adón, la naturaleza no se muestra como un refugio amable: es un espacio inhóspito, un paisaje en el que las ramas se tuercen hacia el lado de la sombra. Incluso la belleza de la tierra brinda a veces al visitante la perplejidad: «Regresan las hojas nómadas. Y pienso: / si la naturaleza es hermosa, ¿por qué yo no?», se interroga la voz de Mente animal, el libro con el que la autora vuelve al mundo rural que abandonaron sus padres y habitaron sus abuelos para reflejar allí el escalofrío y la desazón de la experiencia humana. Adón sabe que en las tardes de cielo limpio también resuena la tormenta, como si en el campo fuera más evidente que el hombre no es sino una criatura salvaje. Un pueblo puede ser el escenario del rencor, del suicidio, de la maledicencia, un enclave marcado por una leyenda oscura: «Usaron las piedras del primitivo puente / y las de la granja del abuelo / que no pudo pagar porque se lo gastó en vino. / Usaron las piedras de la ermita / y todos los niños de la casa nueva / nacieron muertos».

Tras La hija del cazador, la escritora madrileña vuelve a cargar el rifle, y firma uno de los libros más rotundos de 2014, un poemario descarnado y bello en el que a pesar de la crudeza de los ambientes descritos nada parece gratuito o forzado, todo está narrado con una austeridad y una contención admirables. Adón es cada vez más consciente de la plenitud de sus recursos y no necesita recurrir a golpes de efecto: Mente animal es un libro de una intimidad áspera y dolorosa, y sus versos poseen una autenticidad incontestable.

miércoles, 17 de diciembre de 2014

No telling

Vi esta película hace unos días en el Sundance Channel y he de decir que me parece poco recomendable para los amantes de los animales en general y nada recomendable para los amantes de los perros en particular. Pero también he de decir que es indudable que deja su poso y que, ya por eso, supongo que sus responsables se salieron con la suya.

Si es que «la suya» era intentar concienciar a la gente de lo cruel y bárbaro que resulta hacer experimentos con animales.

La película viene a contar la historia de un científico que se esconde con su mujer en una casa de campo para ensayar en animales sus nuevas técnicas médicas que, de tener éxito, le enriquecerán a él y a quienes financian sus salvajadas. 

Jamás la habría mencionado aquí de no haber sido porque hoy no he podido evitar pensar en ella al ir al mercado y ver cómo se exhiben en las vitrinas de las carnicerías los cuerpos enteros de los animales que algunos ya están comprando para comérselos estas fiestas. No es la primera vez que veo semejante exposición, claro está. Y siempre me ha parecido patológica y propia de seres muy alejados de su verdadera naturaleza la ocurrencia de exponer cadáveres de animales en escaparates, entre hojas verdes de adorno, cual bosque, entre frutas o cualquier otro objeto, como si las carnicerías tuvieran también escaparatistas o decoradores de interior poco relacionados con la palabra sensibilidad. Pero el caso es que hoy me ha producido una desazón mayor pasar por delante del muestrario. Al principio no sabía a qué achacar el malestar y, como se suele hacer cuando se quiere encontrar una causa, un origen o una explicación para lo que se siente, me he lanzado a bucear en el recuerdo de manera rápida mientras seguía andando. He retrocedido en el histórico de impresiones intentando averiguar de dónde venía esta mía de hoy, y pronto he comprendido que toda esa indefensión y esa huella de brutalidad procedían de la mezcla explosiva de ver a los clientes de la carnicería riéndose con ganas y fruición del cuerpo de un cochino pequeño junto con las imágenes que todavía me rondan de esta película atroz:


jueves, 4 de diciembre de 2014

Jane Kenyon

Durante la presentación de Mente animal en Zaragoza, Luisa Miñana me habló de la poeta Jorie Graham y de su poemario Rompiente, y gracias a esta recomendación, curiosidades de los hilos literarios, llegué a Jane Kenyon, a quien estoy devorando gracias a la antología que Pretextos publicó en el año 2007, De otra manera, con magnífica traducción de Hilario Barrero.

Dos poemas de Jane Kenyon:
QUIÉN

Estos versos están escritos
por un animal, un ángel,
un extraño sentado en mi silla;
por alguien que ya sabe
cómo vivir sin problemas
entre libros, pucheros y sartenes…

¿Quién es el que me pide que halle
lenguaje para el sonido
que hace la pezuña de una oveja al golpear
una piedra? ¿Y quién pronuncia
las palabras que son mi alimento?


DOS DÍAS SOLA

Tú no estás aquí. Mantengo
el fuego encendido, aunque no hace frío,
alimentando la estufa hambrienta.
Leo el periódico de la tarde
mientras cinco generaciones
me observan por encima del hombro.

En la leñera
la oscuridad me rodea y penetra en mí.
El único sonido que escucho
es mi propia respiración. Quizás
ya no encaje aquí.
Nada me dice lo contrario.




Estas fotografías fueron tomadas en la librería Los portadores de sueños durante la presentación de Mente animal el pasado día 19 de noviembre.

viernes, 28 de noviembre de 2014

No es un asunto de mujeres

Cuando leo noticias sobre asesinatos, violaciones, palizas, humillaciones y todo tipo de afrentas contra las mujeres, sé lo que siento y sé lo que puede sentir cualquier otra mujer. Siento rabia, asco, indignación e indefensión. Son muchos años viendo lo mismo. Escuchando lo mismo. Son muchas las veces en que se me ha dicho «cuando vayas por la calle lleva siempre una llave preparada entre dos dedos». O «muévete por zonas en las que haya mucha gente». Consejos que no reciben los chicos. Consejos con los que tenemos que vivir nosotras desde que empezamos a salir y que, buscando nuestro propio bien, nos generan un miedo que no desaparece nunca. Y es por eso, porque sé que a los hombres no se les da este tipo de útiles y bienintencionadas recomendaciones, porque es precisamente de ellos de quienes tenemos que huir y protegernos, por lo que me pregunto de verdad: ¿qué siente un hombre cuando lee que un padre ha matado a sus hijas o que un marido ha quemado viva a su mujer? ¿Se siente como yo? ¿Experimenta cada una de esas conmociones, ese horror y esa ira al mismo nivel, con la misma intensidad? ¿Quiere salir corriendo también y hacer algo, cualquier cosa? ¿Entiende que la lucha contra esta crueldad constante no es solo un asunto de mujeres? ¿Se avergüenza? Y me pregunto esto porque jamás me he avergonzado de ser mujer pero he de decir que, cuando leo noticias como las que se han publicado hoy, me planteo muy en serio si no me avergonzaría de ser hombre.

domingo, 23 de noviembre de 2014

Five Days to Dance

Ayer por la tarde vi dos películas en Filmin. Una detrás de otra. No es lo que suelo hacer los fines de semana (suelo corregir textos), pero me ha caído encima el preceptivo catarro otoñal con sus correspondientes síntomas de malestar completo, pocas fuerzas, pocas ganas, poca respiración por la nariz y mucho dolor de cabeza, así que, con una mantita, una bufanda (en mi casa siempre hace frío), una infusión y el ordenador encima de las piernas, me dispuse a pasar la tarde del sábado recibiendo imágenes y escuchando historias, uno de los mayores placeres del mundo.


No sé si sería porque estaba débil o si se debió a la extraordinaria capacidad de los directores y protagonistas de Five Days to Dance (la primera de las dos películas que vi) para tocar la fibra sensible del espectador, pero el caso es que hacía tiempo que no me emocionaba tanto con un documental. Empecé a emocionarme con las imágenes de la preciosa casa, el precioso jardín, en el que desayunan en Alemania los dos personajes centrales, los coreógrafos y bailarines Wilfried Van Poppel y Amaya Lubeigt (holandés él, española ella), así que imagino que un tanto flojucha sí que estaba.



Cuando decidí ver Five Days to Dance no tenía ni idea de que la película hubiera sido preseleccionada para los Premios Goya en nueve categorías. Simplemente me dejé llevar por la recomendación de Filmin porque los documentales que ofrece suelen ser excepcionales, y me gustó lo que vi durante los minutos iniciales, cuando los coreógrafos plantean la historia y explican el procedimiento que siguen y sus objetivos, de modo que me puse más cómoda en el sillón. Pasados los primeros momentos de exposición dinámica, con unas imágenes igualmente rápidas, el desarrollo del proyecto en el instituto de San Sebastián me fue interesando menos, y el conjuntado desenlace me pareció demasiado efectista. No obstante, supongo que la película no podía terminar de otra manera. ¿Qué es lo que se nos cuenta en Five Days to Dance? Que es posible ofrecer una educación distinta, más heterogénea, más diversa, y nos lo demuestran con la historia de estos dos bailarines que pasan cinco días en un instituto y que durante esa única semana se esfuerzan por enseñarles sus coreografías a los alumnos que quieran participar en el «experimento» con el fin de que aprendan algo distinto a lo que suelen aprender: a tocarse, a mirarse, a verse, a relacionarse de otra forma, a mezclarse y a liberarse de los prejuicios que genera la rutina. Todo ello en un momento de la vida en el que lo habitual es sentirse torpe, desmañado, inseguro, observado y, a la vez, ninguneado. Los estudiantes han de moverse por una enorme sala y estirarse y expresarse físicamente en lugar de estar horas tomando apuntes y estudiando en el interior de un aula reducida. A partir de una idea tan sencilla y a la vez tan revolucionaria, la de cambiar el estado de cosas durante una semana de un modo no demasiado drástico ya que todo el proceso se desarrolla entre los mismos profesores y los mismos compañeros, en la misma ciudad y el mismo ambiente, van presentándose nuevas posibilidades, aunque también nuevos miedos y nuevos inconvenientes.

Me resultó algo artificiosa la idea de incluir las historias personales de los alumnos en un formato demasiado televisivo y, por tanto, demasiado trillado, pero me interesaron enormemente las dudas, temores y esperanzas de los profesores. Yo ya estaba sensiblona y predispuesta, como he dicho, pero es evidente que hay una intención clara de pulsar las cuerdas emocionales de quienes se disponen a ver el documental, quizá con la buena intención de que todos nos enfrentemos a las situaciones que van surgiendo y, además de verlas y pensarlas, las sintamos como propias para luego poder extender a nuestra existencia las posibles enseñanzas que se van dejando caer por el documental.


¿Qué es lo que más me gustó? El ritmo, la intención y el entusiasmo de los coreógrafos. ¿Lo que más me sorprendió? Que los alumnos sigan hablando demasiado en clase. Sin prestar mucha atención a nada.

sábado, 22 de noviembre de 2014

Escritoras

Penelope Fitzgerald


jueves, 20 de noviembre de 2014

Ayer en Zaragoza

Todo fue una delicia ayer en Zaragoza: volver a ver a mi querida Julia Duce y a los libreros de Los portadores de sueños, Eva y Félix, a quienes nunca podré agradecer lo suficiente toda su amabilidad y su cariño, y el encuentro con Luisa Miñana, que se convirtió en una de las mejores experiencias del año. Su conversación (antes, durante y después de la presentación del libro) fue entusiasta, inteligente y alentadora, y la lectura que hizo de Mente animal no pudo ser más generosa.


Hablamos de poesía, de creación, de la ferocidad y oscuridad de la naturaleza, y de otras poetas, entre ellas, Jorie Graham y su poemario Rompiente, que Luisa me recomendó y que leeré en breve. Ella utilizó el término «ecopoesía» (con toda la prevención que provocan siempre las etiquetas) para referirse al trabajo de Graham y, en cierto modo, también a los textos de Mente animal, y surgió entonces el curioso tema de las influencias a posteriori. Esos libros que no hemos leído aún, pero que parecen haber dejado un poso evidente en lo que hemos escrito. Me acordé del siguiente poema de Antonio Gamoneda, encontrado hace poco, bastante después de haberle puesto el punto final a Mente animal, pero que tan claramente podría haberme empujado a escribir. Servirme de inspiración:

MALOS RECUERDOS

«La vergüenza es un sentimiento revolucionario»
Karl Marx

Llevo colgados de mi corazón
los ojos de una perra y, más abajo,
una carta de madre campesina.
Cuando yo tenía doce años,
algunos días, al anochecer,
llevábamos al sótano a una perra
sucia y pequeña.
Con un cable le dábamos y luego
con las astillas y los hierros. (Era
así. Era así.
Ella gemía,
se arrastraba pidiendo, se orinaba,
y nosotros la colgábamos para pegar mejor).
Aquella perra iba con nosotros
a las praderas y los cuestos. Era
veloz y nos amaba.

Cuando yo tenía quince años,
un día, no sé cómo, llegó a mí
un sobre con la carta del soldado.
Le escribía su madre. No recuerdo:
«¿Cuándo vienes? Tu hermana no me habla.
No te puedo mandar ningún dinero…»
Y en el sobre, doblados, cinco sellos
y papel de fumar para su hijo.
«Tu madre que te quiere.»
No recuerdo
el nombre de la madre del soldado.
Aquella carta no llegó a su destino:
yo robé al soldado su papel de fumar
y rompí las palabras que decían
el nombre de su madre.
Mi vergüenza es tan grande como mi cuerpo,
pero aunque tuviese el tamaño de la tierra
no podría volver y despegar
el cable de aquel vientre ni enviar
la carta del soldado.

lunes, 17 de noviembre de 2014

En Zaragoza

Nos vemos el miércoles, día 19, en la fantástica Los portadores de sueños para hablar de poesía, de árboles y de bestias. Luisa Miñana y yo charlaremos sobre Mente animal a partir de las 20.00h. Un lujo de sitio y un lujo de compañía.


sábado, 15 de noviembre de 2014

El próximo lunes

Tendremos ejemplares de la segunda edición de Mente animal. Impresionante.



viernes, 14 de noviembre de 2014

Mark Hollis de nuevo

Me resulta inevitable regresar una vez más a Mark Hollis y a su mutismo musical. Ya hablé aquí de este músico que optó por el silencio, pero vuelvo a su historia porque me pregunto si esa ocultación suya no se habrá debido, además de a un deseo de huida de multitudes y entrevistas absurdas, a un perfeccionismo extremo, a una búsqueda de lo sublime, a un deseo de lograr lo que nadie logra con facilidad, que puede resultar tan dañino y tan paralizador. A veces sucede que lo que se obtiene no coincide con lo que se quería obtener. Las pretensiones creativas pueden ser muy altas y aunque para los demás el resultado sea excelente, si no lo es para el que tiene la música, el texto, la intriga en la cabeza, la frustración se presenta como algo insalvable, y la sensación preponderante es la de que se ha fracasado. Entonces se puede llegar a optar por el silencio.


Entiendo cualquier búsqueda natural de silencio y la comparto y estoy de acuerdo con las declaraciones de Mark Hollis en las que afirma que antes de tocar dos notas hay que tocar una primera nota y que no se ha de pulsar esa nota a no ser que se tenga una buena razón para hacerlo. Ocurre lo mismo con las palabras: ha de buscarse la palabra justa, bregar por dar con esa palabra y dejarse de artificios que intenten disimular la incapacidad de la palabra elegida para expresar lo que queríamos expresar. Si en prosa es importante, en poesía es esencial: deshacerse del ruido en la música y del ruido en el texto.



Pero una cosa es deshacerse del ruido y otra caer en el silencio absoluto y el abandono. Debe de ser terrible llegar ahí tras un proceso de insatisfacción continuada. De todas formas, imagino que el afán creador se mantiene y que ese enmudecimiento externo es sólo una expresión visible de descontento e inconformismo, y no el reflejo real de un definitivo silencio interior.

viernes, 31 de octubre de 2014

Unas fotos de ayer

Durante la presentación de Mente animal en Intempestivos, ese espacio en el que me habría quedado a vivir. Blanco, limpio, repleto de libros, de sillones y de rincones en los que sentarse a leer con una infusión humeante entre las manos y olvidarse del mundo, del ruido, del cansancio diario. Todas las imágenes que guardo de la tarde de ayer son deliciosas y todas mis palabras de agradecimiento. Para los libreros, para la presentadora, para los asistentes que me hablaron con tanta pasión de María Zambrano… Es imposible sentirse más arropada, más leída, más escuchada. A veces sucede que se forman pequeños grupos excepcionales en un espacio literario también excepcional y el encuentro dura un tiempo breve, poco más de una hora, pero la experiencia permanece para siempre y ayuda y estimula y renueva la curiosidad literaria, y nos anima a seguir con lo que estamos haciendo aunque a veces tanto nos agote.




jueves, 30 de octubre de 2014

Hoy

Tendremos presentación de Mente animal en la recién abierta y recién estrenada librería Intempestivos de Segovia, entre libros, cafés, grandes dibujos de grandes autores en la pared y junto a la escritora Maribel Gilsanz, que ha tenido la inmensa amabilidad de aceptar acompañarme en una charla sobre poesía, poetas, motivaciones literarias, miedos, encierros, casas, bosques y lo que pueda surgir. Tengo muchas ganas de ir a Segovia, de hacer este pequeño viaje atravesando montañas y todo ese verde, de conocer la librería, de meterme en sus estantes y volver a ver a los dos libreros a los que tanto quiero desde hace años. Un lujo de tarde.




miércoles, 29 de octubre de 2014

En la librería Rafael Alberti, ayer

Esta imagen pertenece al encuentro de ayer por la tarde en la siempre acogedora librería Rafael Alberti, entre libros, fotografías, muy buenos amigos y unos cuantos poemas. En ese espacio recogido que tanto anima a la cordialidad y a la confesión, que se va quedando impregnado de todas las palabras que se pronuncian allí y que cada vez rezuma más conocimiento y más generosidad.



lunes, 27 de octubre de 2014

martes, 21 de octubre de 2014

Aladar

En Aladar, suplemento cultural de El Correo de Andalucía, ha salido publicada hoy una reseña sobre Mente animal firmada por Carlos Serrato, para quien sólo puedo tener palabras de agradecimiento. En su reseña, Carlos afirma: «Mente animal es un logro lírico conseguido tallando el frío y las soledades, porque lo que levanta el vuelo en la escritura es la capacidad de Pilar Adón para hacernos sentir la emoción de cómo pueden las raíces de un hogar crecer entre los helechos asfixiantes y la tierra pobre».

Palabras tan generosas como estas se pueden leer aquí: Mente animal en Aladar.

Ya había oído y leído en alguna ocasión que los ambientes del poemario hacen pensar en los propios de un país nórdico. Imagino que la lluvia, el aislamiento, la oscuridad, el frío y el humo de las chimeneas deben de ser tan asombrosos y alarmantes aquí como en cualquier otro rincón del mundo. El aire debe de oler igual.


lunes, 20 de octubre de 2014

En Bilbao

Esta tarde, en el salón de actos de la biblioteca de Bidebarrieta, compartiré recital poético con Elena Medel, Gabriela Wiener, Erika Martínez, María Eloy-García y Cristian Alcaraz. La lectura se celebrará en el marco del festival literario Bilbaopoesía, que acoge entre el 13 y el 22 de octubre a más de una veintena de autores en conferencias, recitales y presentaciones de libros, agrupados este año bajo el título «Reivindica Poesia».


domingo, 19 de octubre de 2014

Lectura en PoeMad

Aquí os dejo unas imágenes de la lectura del viernes por la tarde en el Centro Cultural Conde Duque de Madrid, durante la celebración de la cuarta edición del festival de poesía PoeMad. Me encuentro en la excelente compañía de Carlos Marzal, Felipe Benítez Reyes y Antonio Lucas.



El sábado se celebró un recital colectivo en homenaje a la obra de Juan Gelman y José Emilio Pacheco. En esta ocasión compartí lectura con las poetas Olvido García Valdés, Elena Medel, Noni Benegas, Julieta Valero, Inma Chacón, Almudena Guzmán, Carmen Sigüenza, Vanesa Pérez-Sauquillo y Guadalupe Grande. Sin duda, dos días para recordar.

martes, 14 de octubre de 2014

PoeMad

Los próximos días 17 y 18 de octubre, viernes y sábado, se celebrará en el Centro Cultural Conde Duque la cuarta edición del festival de poesía PoeMad, organizado por la editorial Musa a las 9. Aquí os dejo el programa completo. Las lecturas y actuaciones musicales se irán sucediendo a partir de las 17.30h, y la entrada es libre hasta completar aforo.

Una fiesta de la poesía en Madrid.


sábado, 4 de octubre de 2014

La propuesta

The Proposition

Western australiano del año 2005, absolutamente brutal y poético. Con guión y música de Nick Cave.



Ambientada en desolados parajes sin árboles ni montañas, en una pequeña comunidad de individuos que han ido a instalarse en un territorio seco y rojo de la Australia de finales del siglo XIX y que han de sobrevivir como sea, aunque para ello hayan de olvidarse de su condición de seres humanos, La propuesta habla de venganzas y de ambición. De hombres justos e injustos. De relaciones familiares marcadas por la eventualidad de quién esté detentando el poder en cada momento y de quién sea capaz de resistir vivo más tiempo. Habla de dominación y de odio. De locura. De aguante… Nada especial si pensamos que se trata de un western, pero lo que sí es especial y soberbio es el enfoque. La perspectiva desde la que se examinan todos estos temas y los paisajes en que se desarrollan. El tratamiento del color y del sonido. La presencia constante de la crueldad, y la elección de lo que no se cuenta y lo que no se muestra.

Con una evidente inspiración bíblica, la crueldad asoma por todos lados, y de repente una se asombra de poder estar encontrando belleza en semejante sucesión de barbaridades. Pero sí: hay mucha belleza en esta película. En sus inmensos espacios vacíos. En la constante sensación de irrealidad. En la presencia de un indeterminado elemento sobrenatural. En la extrañeza… E incluso en el miedo.

Guy Pearce, herido y tendido en el suelo, parece un hombre de otro mundo.

Director: John Hillcoat.
Actores: Guy Pearce, Ray Winstone, Danny Huston, John Hurt, Emily Watson.

martes, 23 de septiembre de 2014

Escritoras

Penelope Mortimer


lunes, 8 de septiembre de 2014

¡A los libros!

El escritor gaditano Daniel Heredia (con quien comparto año de nacimiento, además de preferencias e inquietudes literarias) ha tenido la amabilidad de entrevistarme para su blog ¡A los libros! Hemos hablado de novela, de relato y poesía; de creación y edición, y, en general, del «mundo de los libros, de la lectura y de la escritura». Muchas gracias, Daniel, por tus interesantes preguntas y por darme la oportunidad de contestarlas.


lunes, 30 de junio de 2014

Poesía para el estío

Le agradezco enormemente a otro inmenso poeta, Jorge de Arco, su lectura, su dedicación y su reseña, publicada en el diario Andalucía Información. En ella incluye Mente animal como parte de sus recomendaciones estivales, y hace especial referencia al desamparo, a la relación del Hombre con la Naturaleza, a la agonía de la búsqueda y lo inhóspito del ambiente en que se desarrolla esa búsqueda. Y, sí: hay mucho de todo eso en este poemario.

Aquí dejo su texto. Muchas gracias, Jorge:

JORGE DE ARCO - NOTAS DE UN LECTOR
Poesía para el estío

Narradora, editora, traductora… Pilar Adón (1971) es también poeta. Y fe de ello da este tercer volumen que acaba de editar La Bella Varsovia, titulado Mente animal.

En esta entrega, la autora madrileña se adentra en un ámbito tan complejo como actual: el desamparo y el desasimiento del Hombre con relación a la Naturaleza que lo acoge y lo contempla. Dentro de una atmósfera inhóspita, «en un mundo inadaptado (…) y sin la convicción de que el día merezca un amanecer como el que regala» —tal y como afirma Manuel Longares en su palabra previa—, Pilar Adón afila su verso y lo sitúa en los extremos de la conciencia humana: «La tierra abierta en agujeros de seis mil kilómetros / por un ser vivo que, mayor que la ballena azul o la secuoya / recorre el subsuelo en hileras de insectos».

Con la certeza de que su decir es, a su vez, compromiso y consuelo, su búsqueda va más allá de lo puramente literario. Sus poemas se enfrentan a la necesidad de habitar en territorios comunes, junto a los animales, las plantas…, quienes son, al mismo tiempo, sustento y protección. De ahí, la incesante batalla, la sonora contradicción, que convierten su cántico en agónica verdad: «A pesar del aislamiento y de las nuevas normas / 
siempre habrá quien se agache a la tierra / 
y se levante de nuevo / 
para mirar con perspectiva. / 
Quien vigile buscando más que subsistencia. / 
Quien cace y declare que se puede vivir sin casa. / 
Sin una puerta a la que regresar».

Poemario, en suma, sin disfraces, áspero por sincero, recomendable por corazonado.

Jorge de Arco

domingo, 29 de junio de 2014

La naturaleza fiera

Después de una intensa, estimulante, ágil y poética conversación con Braulio Ortiz acerca de los poemas de Mente animal y de otros temas, hoy se ha publicado su artículo en Diario de Sevilla y se puede leer aquí: La naturaleza fiera. En él se habla de la naturaleza, de la salvación, de los niños, del desarraigo, de escopetas, animales muertos y centrales nucleares.

Le agradezco a Braulio una de las entrevistas más interesantes que me han hecho en mi vida, y que la haya transformado en un texto tan directo y explicativo. En él se habla mucho del miedo y del aislamiento que «asoman como temas en un poemario de extraño lirismo y excepcional fuerza».

sábado, 28 de junio de 2014

Sobre los miedos

El poeta Francisco Onieva ha leído Mente animal y ha tenido la amabilidad de escribir una reseña para el suplemento cultural Cuadernos del Sur.

Le agradezco no sólo el tiempo que ha dedicado a leer el poemario y a escribir sobre él, sino también, muchísimo, que destaque la importancia del miedo y de la naturaleza, y que hable del lenguaje, de lo agresivo y lo directo de las palabras.

Aquí la reseña de Francisco Onieva:

Sobre los miedos

Mente animal. Autora: Pilar Adón. Editorial: La Bella Varsovia.
Córdoba, 2014

Los miedos, tanto aquellos que articulan lo ignoto como los cotidianos, son los materiales con los que Pilar Adón (Madrid, 1971) construye Mente animal, su tercer poemario. El libro, cuya sugerente ilustración de cubierta corre a cargo de Laia Arqueros, se articula en dos partes: «El mundo hueco», compuesta por veintidós poemas, y «Decálogo», por otros diez. Si en la primera la mirada del yo poético se centra en la realidad exterior, con quien mantiene una relación conflictiva y dolorosa, sustentada en la inadaptación, en la segunda, y lejos del carácter admonitorio que sugiere el título y que se cuela por algunos versos, se plantea una indagación en la complejidad interior de un yo irrenunciablemente femenino. Y aquí juega un papel crucial la naturaleza, vista como una fuerza imposible de dominar que encierra en sí misma incertidumbre y desasosiego al tiempo que supone una huida a las regiones más sombrías de nuestra alma, aquellas que más nos cuesta aceptar. Para esto la poeta acude a un lenguaje claro y directo, sin ambages ni impostados recursos, llegando a utilizar un léxico violento y, en cierta medida, agresivo, pero que encierra cierta confianza en el ser humano («No todos los animales devoran a sus víctimas vivas / ni todos los hombres extraen provecho de los otros»).

Francisco Onieva

jueves, 26 de junio de 2014

Pearl Jam en Viena

Ayer miércoles, 25 de junio. Desde las gradas. Fila 8, asientos 11 y 12 del Wiener Stadthalle.



El setlist, impresionante:

SET 1
Long Road
Can't Keep
Black
Last Exit
Why Go
Spin The Black Circle
Hail, Hail
Got Some
Lightning Bolt
Mind Your Manners
Severed Hand
I Got Id
Amongst The Waves
Rain
Even Flow
Sirens
Wishlist
Rats
Public Image
Do The Evolution
Rearviewmirror

ENCORE 1
The Needle and The Damage Done
Speed of Sound
Footsteps
Elderly Woman Behind The Counter In A Small Town
Daughter
State Of Love And Trust
Brain Of J.
Lukin
Porch

ENCORE 2
Smile
Fuckin' Up
Alive
Baba O'Riley
Indifference



Hace dos años, cuando viajamos a Berlín también para ir a un concierto de Pearl Jam y, de paso, para conocer la ciudad, nos sorprendió la impasible tranquilidad de los berlineses, que no se levantaban de sus asientos, que se quedaban quietecitos sin mover siquiera un pie como se mueve un pie cuando se oye una música conocida. Que no aplaudían ni silbaban ni emitían chillidos de emoción desbordada. Esta vez, en Viena, ha habido más ajetreo a nuestro alrededor, bastante más. Eso sí, siempre con un respeto impresionante. Cuando se levantaron las chicas que estaban delante de nosotros para aplaudir y moverse un poco, con su pelo inmaculadamente austriaco, nos preguntaron con toda la amabilidad del mundo si estando de pie nos dejaban ver, y luego nosotros hicimos lo propio con unos rusos que estaban sentados detrás. Civismo absoluto. En un concierto que fue, desde el principio y hasta la última nota, de lo mejor y más inspirado que he visto y oído en mi vida. Jamás creí que fuera a oír «Rats» en directo, y terminar con «Indifference» después de su habitual versión de «Baba O'Riley», con todas las luces encendidas, fue un regalo. Había leído que Eddie Vedder tenía una rodilla mal y que en conciertos previos no se había movido mucho por el escenario, pero debió de curársele pronto porque en Viena ha saltado, ha corrido, se ha subido a una de las plataformas laterales y luego bajó a saludar al público del otro sector. El sonido fue perfecto y la organización también.

Lo que la organización no pudo evitar fue que nos lloviera, y mucho, ayer por la tarde, después de comer. Una lluvia torrencial de más de una hora. Algo que, según los vieneses, en esta época del año no es normal (aunque unos ucranianos nos dijeron que sí). En cualquier caso, la ropa se secó, el pelo también, y lo que nos ha quedado es la fascinación, el entusiasmo y la constatación de que es una suerte que el grupo siga componiendo y dando conciertos para que podamos seguir escuchando y viendo lo que hacen. En mi historia de devociones musicales, han sido muchas las veces en que he empezado a admirar la música de un grupo que ya se había disuelto, pero con Pearl Jam todo empezó desde el primer momento, desde las primeras canciones y el primer descubrimiento gracias a Paco Pérez Bryan y su programa «De 4 a 3». Disco tras disco, en lo que son ya muchos años. Desde la universidad y hasta hoy. Pasando por distintos trabajos, distintos pisos de alquiler y distintos modos de audio: de la TDK al ipod. Ya nadie se tira desde el escenario hacia el público en sus conciertos. Ya nadie navega sobre una marea de brazos. Ahora pedimos permiso para levantarnos de las sillas y aplaudimos un rato, descansamos otro rato y volvemos a aplaudir. Sentimos que la corriente que nos recorre la espalda al oír temas como «Black» o «Rearviewmirror» es idéntica a la de los 90 (una década que, por lo demás, me interesa más bien poco), pero no hay más que ver sus caras y ver cómo se han transformado ellos para adivinar lo que habremos cambiado también nosotros.

Pero da lo mismo. Crecemos. Aprendemos. Y cantamos:

I had a false belief
I thought I came here to stay
We're all just visiting
All just breaking like waves
The oceans made me, but who came up with love?
Push me, pull me... push me, or pull me out.

martes, 17 de junio de 2014

Escritoras

A.S. Byatt


jueves, 12 de junio de 2014

Con Sara Mesa

Estas fotografías pertenecen a la presentación que hicimos de Mente animal en Sevilla, en la librería Birlibirloque, donde Sara Mesa tuvo la inmensa generosidad de acompañarme.



Muchas gracias, Sara, por tus palabras, por tus preguntas, por hacer que la presentación fuera tan agradable y tan cómoda, y por decirme que los poemas te transportaban a mundos nórdicos.

lunes, 9 de junio de 2014

«Mente animal» en Sevilla

Allí nos vemos…


domingo, 8 de junio de 2014

El sofá rojo

Después de leer Mente animal, mi querida Ciboulette ha escrito unas palabras preciosas sobre el libro en su estimulante blog literario El sofá rojo. Las reproduzco aquí:


Hay un olor a tierra en el último poemario de Pilar Adón que parece querer quedarse ahí para siempre. Da la impresión de que si nos mantuviéramos parados un rato en esta tierra que son las páginas del poemario, nos empezarían a crecer raíces dentro del cuerpo que nos atarían a esa tierra eternamente. Esta es la sensación: la naturaleza se une al hombre y a pesar de las «cosas» (casas, tejas, teteras, vasos) lo natural se impone y deja en evidencia al hombre, al que, parado, las raíces se le acaban metiendo entre los huesos y las venas. La naturaleza le crece dentro y él se va secando, deshumanizando por el hambre, la miseria, el alcohol, la tristeza. Pierde de hombre y gana de árbol, de rama nueva. «Florecerá la rama que me raja por dentro. / Tantas hojas en torno a mí.»

Qué bien visualizado el mundo rural del hambre, cruel, sin compasión, que arrebata al hombre su condición humana y lo iguala al animal. A cada imagen, un verso, ¿o es al revés? Leo un verso y me quedo con el corazón encogido porque he visto, he sentido ese mendrugo de pan, las migas congeladas, la mujer de cuarenta años colgada en una habitación, ya descansando. Luzdivina, madre o hija. «El hogar está donde el calor. / Donde las raíces.» Qué contradictorio que lo que nos mata pueda ser el origen de que lo animal crezca en nuestro interior. Los genes y lo salvaje unidos para deformarnos. Vivencias traumáticas que sin querer nos apegan a una tierra y a unas raíces que a veces no queremos pero que están ahí. Podemos vivir soportándolas o conocerlas sin que nos impidan seguir viviendo de dolor: «Hay quien lo vive y luego lo envuelve. / Hay quien lo vive y se queda siempre ahí».

Vivir y olvidar, olvidar para poder seguir. A veces dan ganas de no vivir en la simpleza y se piensa en la huida, retorcida e imposible, fantasía de muerte improbable: «Sería fácil cogerme con una mano. / La cabeza inmovilizada con la otra. / Decir palabras suaves para evitarme el espanto / y retorcerme el cuello de un giro simple, como el / simple animal que soy, / sin prolongar más el sufrimiento». Pero al final se vive para contar, se está ahí parado, se padece porque es natural y a veces el esfuerzo merece la pena, sólo a veces.

miércoles, 4 de junio de 2014

martes, 3 de junio de 2014

Feria del Libro de Madrid

El próximo día 5 de junio, jueves, entre las 7 y las 9 de la tarde, estaré firmando ejemplares de Mente animal en la caseta de la librería Rafael Alberti (nº 40). Elena Medel firmará a la misma hora y en la misma caseta ejemplares de su magnífico poemario Chatterton, premio Loewe de poesía joven, publicado por la editorial Visor.


Una ocasión perfecta para encontrarnos. Poesía, árboles, libros…

viernes, 30 de mayo de 2014

La nube habitada

En La nube habitada, la sección de poesía de la revista digital FronteraD que coordina el poeta, pintor y galerista Anxo Pastor, aparecen hoy poemas de La hija del cazador, con unas magníficas ilustraciones del propio Anxo. ¡Gracias!



Se arde en silencio.
Es posible en silencio el mar y es posible la tormenta.
La concentración irresistible
y la timidez de un gesto.
Las cabezas giran hacia el amante de las bestias.
Solo los animales miran como miran,
con esa atención desnuda.

martes, 27 de mayo de 2014

Puntos cardinales

Hoy se habla de lo que se esconde tras los poemas de Mente animal en la sección que lleva Gorka Elorrieta en la revista MadrizPuntos cardinales.

La naturaleza, el miedo, la debilidad y la imposibilidad de la realidad. Todo ello dosificado en pequeños párrafos muy visuales.

Gracias, Gorka. Y gracias, Madriz.


A pesar del aislamiento y de las nuevas normas
siempre habrá quien se agache a la tierra
y se levante de nuevo
para mirar con perspectiva.
Quien vigile buscando más que subsistencia.
Quien cace y declare que se puede vivir sin casa.
Sin una puerta a la que regresar.
Sin cama blanca ni mesa de fotos.
Dejando las manos en los bolsillos y sabiendo de qué se huye.

lunes, 26 de mayo de 2014

Página en Facebook

Desde hoy mismo tengo página en Facebook. La gestiona la editorial La Bella Varsovia.


¡Gracias, Elena Medel!

sábado, 10 de mayo de 2014

Dibujos de Anxo Pastor

El poeta, pintor y galerista Anxo Pastor ha tenido la inmensa amabilidad de mandarme los dibujos que ha ido haciendo mientras leía los relatos «El fumigador» y «El infinito verde» de El mes más cruel. Anxo coordina e ilustra la página de poesía «La nube habitada» de la revista FronteraD, y no se me ocurre mayor generosidad por su parte que la de enviarme sus poemas y sus dibujos de una manera tan espontánea y desinteresada. También él habla en sus obras de aislamiento, de la búsqueda de algo distinto, de paisajes retirados y del refugio en el bosque de unos personajes que huyen del miedo, de los demás o de sí mismos.



sábado, 26 de abril de 2014

Mente animal

Próximamente publicaré un nuevo libro de poemas en la editorial La Bella Varsovia y hoy mismo he sabido que ya tenemos portada. Son muchas las personas a las que tengo que dar las gracias. Entre ellas, a las bellas editoras Elena Medel y Alejandra Vanessa; a Manuel Longares, que muy generosamente escribió un texto para la contra del poemario, y gracias a Laia Arqueros, artífice de tan bella ilustración.

No me canso de dar las gracias.

Pego aquí el texto de Manuel Longares y la imagen que abre el libro, ya en imprenta:

Quedará lo que no tiene sentido ni razón ni fin, dice Pilar Adón en este clarividente poemario, el segundo que publica en La Bella Varsovia después de La hija del cazador. Mente animal es una vía de adaptación al paisaje, una lúcida confrontación con la evidencia. Quedará lo que no se puede proteger y lo que no se puede destruir. En un mundo inadaptado, bajo la dolorosa nitidez del cielo, entre la lluvia estridente o el viento triste y sin la convicción de que el día merezca un amanecer como el que se regala, subsiste lo que arraigó o deambula, la caza, el alimento, la conservación entre vegetales y gusanos, eso que constituye la ciencia del sentimiento único y desprende calor de hogar, donde se echan raíces y en torno a lo cual merodea la supervivencia o la memoria de quien fomenta nuestra blanca alerta porque, sin dotes para resistir en la espera, entregó su cuerpo al balanceo de un suicidio pregonado.

Manuel Longares


martes, 15 de abril de 2014

Expo Eñe

En Alcalá de Henares se está celebrando una exposición sobre la magnífica revista Eñe y su evolución a lo largo de todos estos años. Estará abierta al público entre el 6 de marzo y el 20 de abril y puede visitarse en el Antiguo Hospital de Santa María la Rica. Tengo la inmensa suerte de que los responsables de la revista y de la exposición hayan decidido incluir en la misma un texto manuscrito con las últimas líneas del relato que publiqué con ellos en el número 5.

La muestra recoge una amplia recopilación de portadas y de ejemplares que cuentan, en total, con textos de más de 400 autores. En una de las paredes de la exposición aparecen todos los nombres.

Os dejo aquí un par de fotos.



viernes, 11 de abril de 2014

Gracias a Ángeles Encinar

Con quien he compartido momentos inmensos a lo largo de los últimos meses.

En la librería Rafael Alberti, tras la presentación de la antología Cuento español actual (1992-2012), publicada este año por Cátedra.


Con Miguel Ángel Zapata, Óscar Esquivias, Ángeles Encinar, Josune García y Manuel Longares.


Ángeles Encinar y Manuel Longares durante la presentación del libro. 


En la azotea de la Saint Louis University, tras una vivísima charla con los alumnos de Ángeles en torno al relato y sus circunstancias. Con Ángeles Encinar y Enrique Redel.

Gracias, Ángeles, por propiciar tan grandes encuentros con tan buenos amigos y en lugares tan estupendos y acogedores.

miércoles, 26 de marzo de 2014

Cuento español actual (1992-2012)

Mañana jueves, día 27 de marzo, a las 19,30h, en la librería Rafael Alberti (Tutor, 57), nos reuniremos para presentar la antología de relatos Cuento español actual (1992-2012), publicada por la editorial Cátedra con edición de la profesora Ángeles Encinar. El acto contará con la presencia del escritor Manuel Longares y algunos de los autores antologados.

Allí volvemos a vernos.


domingo, 23 de marzo de 2014

Terence Dooley en Madrid

Hoy hace justo una semana que fuimos a Barajas a recoger a Terence Dooley, albacea literario y yerno de Penelope Fitzgerald, y a lo largo de estos días hemos compartido charlas sobre la obra de la autora, naturalmente, pero también sobre otros libros, sobre poesía, el mundo de la edición, la vida en Londres, la vida en Madrid, las librerías y el jamón. Tuvimos un encuentro con los lectores de La Central de Callao (sobre La librería) y los de la Rafael Alberti (sobre La flor azul), y en ambos casos dominaron la complicidad, la cercanía, la presencia constante de Penelope Fitzgerald y cierta sensación de nostalgia.

El inicio de la primavera en Madrid nos ha acompañado maravillosamente.

Aquí dejo unas fotos:
En el escaparate de la librería Rafael Alberti

Durante el encuentro con los lectores

Con el equipo de Impedimenta al completo

domingo, 2 de marzo de 2014

Sobredosis del 73

Ayer por la tarde vi tres películas, dos de ellas del año 73: Badlands (Terrence Malick) y Scarecrow (Jerry Schatzberg). En medio metí Onegin (Martha Fiennes), de la que recordaba con arrobo la onírica escena del duelo como una de las secuencias más inspiradoras de la literatura en el cine, pero de la que había extraído por completo la presencia de Liv Tyler, todo labios y todo desinterés. No entiendo esa querencia por los rostros flojos, casi aburridos, para encarnar personajes femeninos que representan la búsqueda de lo que no se les muestra, que se pasan el día con un libro en la mano (gran gesto estético) y que en principio se rebelan contra lo que hay. No sé por qué Liv Tyler ni por qué Keira Knightley. Imagino que los directores o los productores piensan en el público masculino cuando las eligen porque quizá crean que personifican el ideal de fragilidad con carácter o el ideal de intelecto con gran delicadeza que hay que proteger. Esos tópicos comparables al del bravo príncipe azul.

En cualquier caso, los platos fuertes fueron las otras dos. Tras ver la última escena de Scarecrow un par de veces pensé que no era extraño que después de estos trallazos de los 70 llegaran los Spielberg y el cine para adolescentes americanos que no tenían ganas de la menor complicación mental. Cambió la situación económica y cambió el público que pagaba para entrar en las salas de cine. Y se produjo la habitual curva de montaña rusa, hacia abajo, en este caso.




De Badlands me quedo con las escenas de la casa en el árbol. El bosque forma parte del comienzo, de lo fecundo y lo inaugural. Las tierras áridas vendrán más tarde.






Y de Scarecrow, sin duda, la escena de la fuente, hacia el final. Uno de los momentos más bestias de la historia del cine. Mientras la veía se me ocurrió que ya no es nada fácil descubrir actuaciones así en las películas actuales. Quizá Philip Seymour Hoffman, pero ya no está.